Por Sol Wolf:
Llegadas estas fechas, en las que se ponen de manifiesto valores, como la unión familiar, la solidaridad y los buenos gestos, hemos querido repetir esta actividad que tuvo tan buen resultado, puesto que fue una experiencia muy agradable y enriquecedora para todos los involucrados.
La actividad en cuestión es sencilla, la primera parte, consiste en la realización de felicitaciones navideñas de parte de alumnos del colegio Las Culturas, con unos destinatarios especiales, los residentes del centro de la tercera edad, donde hago terapia ocupacional.
La interacción generacional, entre dos colectivos tan distantes en edad, promueve valores en los niños de empatía y altruismo, de forma divertida y amena, fomentando la consideración hacia otros colectivos. En los mayores, os lo digo como testigo de ello, activa el entusiasmo y la esperanza de forma entretenida, provocada por un contagio de la energía y la vitalidad de los pequeños.
La segunda parte será la respuesta de estos mayores, después de las vacaciones, a este gesto tan genuinamente navideño, así que sólo despedirnos con un ¡CONTINUARÁ…!
Llegadas estas fechas, en las que se ponen de manifiesto valores, como la unión familiar, la solidaridad y los buenos gestos, hemos querido repetir esta actividad que tuvo tan buen resultado, puesto que fue una experiencia muy agradable y enriquecedora para todos los involucrados.
La actividad en cuestión es sencilla, la primera parte, consiste en la realización de felicitaciones navideñas de parte de alumnos del colegio Las Culturas, con unos destinatarios especiales, los residentes del centro de la tercera edad, donde hago terapia ocupacional.
La interacción generacional, entre dos colectivos tan distantes en edad, promueve valores en los niños de empatía y altruismo, de forma divertida y amena, fomentando la consideración hacia otros colectivos. En los mayores, os lo digo como testigo de ello, activa el entusiasmo y la esperanza de forma entretenida, provocada por un contagio de la energía y la vitalidad de los pequeños.
La segunda parte será la respuesta de estos mayores, después de las vacaciones, a este gesto tan genuinamente navideño, así que sólo despedirnos con un ¡CONTINUARÁ…!
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